Gastamos en limpiar chicles el doble de lo que cuestan . Según un estudio del Ayuntamiento de Zaragoza, una brigada quita a diario 2.100 pegotes de chicel de media en las aceras del centro de Zaragoza. Cada masticable que arrancan le cuesta al Ayuntamiento 0,11 euros, mientras que el precio medio de compra de una unidad en las tiendas asciende a 0,05 euros. En 2006. En Murcia, según el diario 20minutos, el Ayuntamiento gasta 12.000 euros al mes en eliminar los chicles. Además del coste, que es grande y de lo difícil que resulta de eliminar, se quita por higiene, porque pueden acumular miles de bacterias. Pero no es un problema local: en Liverpool (Inglaterra), donde gravan cada paquete de chicles con un impuesto, o en Pekín (China),
donde se han planteado ilegalizarlos tras recoger 600.000 chicles pegados al suelo en la plaza de Tiananmen.
¿Sabes cuánto cuesta degradarse?
5 años Un trozo de chicle masticado se convierte en ese tiempo, por acción del oxígeno, en un material superduro que luego empieza a resquebrajarse hasta desaparecer. El chicle es una mezcla de gomas de resinas naturales, sintéticas, azúcar, aromatizantes y colorantes. Degradado, casi no deja rastros.
¿A qué viene esto?
Ya que no hemos conseguido cambiar los hábitos y seguimos utilizando la calle como si fuera la bolsa de basura:
El Gobierno aprueba los chicles menos pegajosos. El empleo de una nueva sustancia en su fabricación facilitará las tareas de limpieza
Con esta medida el Gobierno pretende reforzar las garantías sanitarias para la fabricación de la goma base que servirá como ingrediente básico para la producción de chicles.
En cuanto a las nuevas sustancias que podrán incorporarse para su producción, a petición de la industria, se ha incluido un nuevo polímero sintético, el copolímero de acetato de vinilo y laurato de vinilo, que permite la fabricación de chicles que se pegan menos a las superficies, lo que facilita las tareas de limpieza