Renacimiento. Contexto y evolución

El nacimiento de Venus, de Sandro Botticelli, expresa simbólicamente el nacimiento de la Venus Humanitas, es decir, de la unidad, la armonía, encuadrada dentro de los tres elementos: tierra, mar y aire. Venus emerge del mar sobre una concha que es empujada a la playa por el soplo de los dioses alados, entre una  lluvia de flores. Sobre la arena, una de las Ninfas la espera con un manto de púrpura. Todavía  no existe preocupación por la perspectiva ni por la creación del espacio. La preocupación se centra en la línea, lo curvo, los fondos planos, y la profundidad atmosférica. La pintura nos  muestra una temática que se relaciona con las doctrinas neoplatónicas recogidas por los intelectuales y artistas florentinos, según las cuales el ser humano debía buscar la unidad entre  la belleza, el amor y la verdad, estas cualidades se encarnan en la figura de la Venus.

Comenzamos el apartado dedicado a la música renacentista con una soberbia descripción de la batalla de Marignan, presenciada por el mismo autor de la música: Clemence Janequin. Un verdadero bombazo musical que llegó a ser la obra más interpretada en la Europa del siglo XVI. La composición alude a un hecho bélico acontecido en septiembre de 1515 y mediante el cual las tropas del rey francés Francisco I lograron la conquista del Milanesado al vencer a las fuerzas oponentes de la Confederación Helvética. Aquel episodio trajo consigo una desestabilización política en toda Europa que desembocó posteriormente en la implicación del emperador Carlos V en Italia. En  la obra, hay fragmentos onomatopéyicos en los que se trata de imitar el sonido real de una  batalla. Esta fue una característica muy común en muchas otras obras del compositor francés.

El término Renacimiento hace referencia a un período histórico en el que Europa volvió a mirar hacia la Antigüedad Clásica, Grecia en concreto. Fue una época de avances en investigaciones científicas, exploraciones y descubrimientos. Colón dio con América; Gutemberg inventó la imprenta; Copérnico, Galileo o Kepler fueron esenciales para la ciencia…Por no hablar de la pintura, la escultura, la arquitectura… Pero, al tiempo que se revalorizaba lo antiguo, soplaban vientos de cambio. El humanismo (movimiento intelectual y filosófico basado en el estudio de los textos antiguos y que tiene por objeto el desarrollo de las  cualidades esenciales del hombre) y el antropocentrismo (doctrina que sitúa al hombre en el centro del universo, al contrario que en la teocentrista época medieval) influyeron en el desarrollo de la música profana (chanson, madrigal, villancico…) y de la música instrumental (la vihuela, instrumento cortesano por excelencia en la Península Ibérica). Ello no supuso que la música religiosa perdiera importancia durante el Renacimiento; de hecho, la Reforma y posterior Contrareforma nos dan una idea de cómo la religión, pese a todo, siguió teniendo un peso relevante.

La vuelta al ideal clásico la comprobamos en la búsqueda de la naturalidad,  la racionalidad y el equilibrio (los cuatro registros vocales), así como en la utilización de la mitología o la importancia otorgada a la naturaleza (madrigalismos). Pese a esto, debemos destacar que los compositores se liberaron de muchas de las normas de la música medieval, con el propósito de conseguir una mayor expresividad. Musicalmente. Una de las rupturas más importantes respecto al estilo medieval se dio en la textura, como veremos. Si la tendencia de los compositores del Medievo fue producir contrastes entre las líneas melódicas superpuestas, los renacentistas se propusieron fusionar estas melodías, bien mediante un estilo sencillo, vertical y basado en acordes (homofonía), bien escribiendo en estilo  contrapuntístico. Más tarde, en los albores del barroco, el intento de recuperar la antigua  tragedia griega dará como resultado, de forma paradójica, la creación de un nuevo género: la ópera. Pero esa es otra historia.

Lo que viene ahora el caso es señalar que el arte renacentista se inspira en el clasicismo greco-romano. El ideal de belleza es  el equilibrio y la proporción, como en el Hospital de los inocentes de Florencia, de Filippo Brunellesci. O en en la Entrega de las llaves a San Pedro, de Il Perugino.

A continuación se enumeran algunos rasgo generales de la música renacentista:

a) Triunfa y se desarrolla la polifonía, que alcanzará un gran refinamiento.
b) A menudo, los acentos musicales coinciden con los del texto.
c) La melodía rara vez existe por sí sola, sino que acostumbra a estar entretejida con las
restantes líneas melódicas. En las danzas y las canciones, es más habitual encontrar
una sola melodía.
d) Hay pocos cambios dinámicos.
e) En el plano tímbrico, la gran protagonista es la voz.
f) Domina la textura contrapuntística, basada en la imitación y el equilibrio entre las
voces.
g) La música religiosa conserva el texto en latín; la profana se escribe en distintos idiomas
y se llena de efectos “pictóricos” como onomatopeyas.

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